Nuestro propósito es aprovechar la tecnología en beneficio de la divulgación, el análisis, la controversia, la verificación de los grandes asuntos en que aparece el Derecho, en cualquiera de sus ramas; los procesos judiciales de trascendencia y los más importantes debates y acontecimientos.
 
La pedagogía jurídica es una de nuestras preocupaciones. Por ello, varios de nuestros programas se destinarán a examinar el desenvolvimiento histórico del Derecho, tanto el Universal como el colombiano. Y con la misma motivación, dedicaremos tiempo al lenguaje jurídico, presentando a nuestros oyentes en términos comprensibles los alcances, el sentido y la distinta acepción de términos, frases y figuras del Derecho.
 
Procuraremos una permanente actualización en las distintas ramas del Derecho: en el Derecho Constitucional, en el Internacional, en el Civil, en el Comercial, en el Laboral, en el Penal, en el Tributario, en el Ambiental, en el Procesal, en el Administrativo, en el Financiero, en el Indiano. Y para tener una visión más universal, tan necesaria para la formación del buen jurista, también tendremos programas de historia, literatura y cine.
 
Contamos con la presencia de expertos de diferentes nacionalidades, y también de orientaciones distintas, pues una característica de nuestra emisora radica en el pleno ejercicio de la libertad de pensamiento y opinión; en el pluralismo; en la libre expresión dentro del debido respeto a las personas y las instituciones; en la total ausencia de censura; en la presentación imparcial y objetiva de los temas; en el equilibrio y la seriedad.
 
Elemento básico dentro de la estructura de nuestra programación es el conocimiento, la divulgación y la promoción de los Derechos Humanos, y por eso, a lo largo de muchas horas, podrán escuchar informaciones, análisis y debates sobre temas relativos a tales derechos, a la búsqueda de su efectividad y respeto; a lo que pasa en el mundo tanto cuando los derechos son respetados como cuando son vulnerados o puestos en peligro. Con la participación de instituciones oficiales y de organizaciones internacionales, así como de instituciones privadas promotoras de los Derechos Humanos, intentaremos una labor pedagógica permanente en la cual será primordial el Derecho Comparado.
 
Ciertos sectores y grupos, discriminados, débiles o marginados, ocuparan nuestra atención. Así, dedicaremos programas especiales a la mujer, a la familia como institución básica de la sociedad, a la niñez, a la juventud, a las personas de la tercera edad, a los discapacitados, a las comunidades indígenas y afrodescendientes.  Todos ellos tendrán posibilidad de participar en lo que podrá considerarse la tribuna de los derechos.