CANTIDAD Y NO CALIDAD EN LAS FACULTADES DE DERECHO DEL MUNDO. Son tantas las personas que ingresan a las facultades de derecho que algunos países han impuesto requisitos adicionales para ejercer la profesión.
En España, por ejemplo, cientos de titulados en Derecho, esperan se les practique un examen cuya convocatoria está en manos del Ministerio de Justicia y solo si lo aprueban, se les permitirá ejercer la abogacía. El requisito existe desde el año 2006 y obliga a los titulados en derecho, cursar un máster en abogacía y presentar el examen, para poder practicar válidamente la profesión.
La mala noticia para los abogados, en España, es que el Ministerio de Justicia, en lo corrido de este año, ha pospuesto la prueba varias veces y quienes ya terminaron el master se encuentran a la espera y algunos despachos no contratan, por política institucional, personas que no sean abogados titulados.
Ante el retraso en la convocatoria, 70 egresados, resolvieron constituir la asociación de abogados sin toga para exigir del Ministerio de Justicia, la convocatoria de la prueba. El Ministerio de Educación emitió un concepto revisado posteriormente por el Ministerio de Justicia, conforme al cual, están saliendo cada año en España, 10.000 estudiantes de las facultades de derecho y en lugar de sentir tranquilidad ante las cifras, lo que se presenta es una enorme preocupación. La realidad, es que no son muchas las ofertas de trabajo para los abogados y las que existen, están mal remuneradas.
Juan Zornoza, director del máster de abogacía de la Carlos III, dice que el “Derecho se ha convertido en una carrera que escoge mucha gente que no sabe que estudiar y tienen que saber que con el grado no haces nada”. ¿Son las facultades de derecho un buen negocio? Si se trata de recibir a quienes no tienen la vocación, no saben que estudiar y terminan llegando al derecho como su única opción, tendríamos que aceptar que si lo es.
De ahí la necesidad de incrementar los requisitos para ejercer la profesión. En Alemania, por ejemplo, cuando los estudiantes de gradúan, deben presentar un primer examen que los habilita para hacer prácticas y después de realizadas éstas, un segundo examen para acceder a la judicatura.
En Italia, es necesario pasar un examen de los colegios de abogados. En Francia, se tiene que pasar un examen diseñado por el gremio de abogados, si el estudiante logra pasarlo puede ejercer como abogado pero si no, solo puede ejercer como jurista o consultor.
En Colombia, la Constitución de 1991 consagró en el artículo 26 el derecho a escoger profesión u oficio. En dicho artículo se establece que, “Toda persona es libre de escoger profesión u oficio. La ley podrá exigir títulos de idoneidad. Las autoridades competentes inspeccionarán y vigilarán el ejercicio de las profesiones. Las ocupaciones, artes y oficios que no exijan formaciónacadémica son de libre ejercicio, salvo aquellas que impliquen un riesgo social”.
Es decir, la libertad para escoger profesión es un derecho fundamental consagrado en la constitución y hace parte del libre desarrollo de la personalidad. No obstante, el mismo artículo 26, establece que esa libertad no es absoluta, pues el legislador puede llegar a limitarla exigiendo “títulos de idoneidad”.
En Colombia también son preocupantes las cifras. Se abren facultades de derecho todos los años, cantidad de egresados salen de esas facultades y esto a pesar de que para obtener el título deben presentar exámenes de todas las materias –preparatorios-, cumplir con el requisito del consultorio jurídico y la judicatura, o en su defecto, presentar un trabajo escrito denominado tesis.
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