“Masacre en París”, “Noche de terror en París”, “Masacre terrorista en pleno París”, “El horror”, “Muerte en Francia”, “Guerra”, “La guerra en pleno París”, “El horror retorna en el corazón de París”. Estos y similares titulares ocupan las primeras planas de los periódicos europeos y norteamericanos, y en el mundo entero, tras los cruentos atentados llevados a cabo anoche -y en las últimas horas reivindicados por Isis- en el centro de la capital francesa. En el Estadio de París, durante el partido de fútbol entre Alemania y Francia, en el que estaba presente el Jefe del Estado francés Francois Hollande, al menos tres explosiones, cuatro muertos y varios heridos; en el teatro Bataclán, en el centro de París, en donde se presentaba una banda norteamericana, toma de rehenes por terroristas, vestidos de civil, muy jóvenes, sin máscaras, que portaban armas de fuego AK-47 de gran alcance, con un saldo de casi cien muertos y muchos heridos graves; en el Centro Comercias de Les Halles, cerca de la catedral de Notre Dame, otro ataque armado con número indeterminado de víctimas.
Hasta el momento de este informe, se habla oficialmente de al menos 130 muertos y 180 heridos (Le Figaro habla de 215, 80 de ellos en estado crítico). Al parecer, en efecto hay muchos heridos de gravedad, lo cual hace pensar que el número de víctimas mortales aumente en las próximas horas.
En el curso del día de ayer, pocas horas antes de los atentados en Francia, Estados Unidos había anunciado estar “razonablemente seguro” de haber dado muerte al terrorista de origen británico llamado “John el yihadista”, del Estado Islámico, autor de las muertes por decapitación de varios ciudadanos ingleses y norteamericanos. Según las informaciones, el criminal habría sido dado de baja mediante un ataque de dron en Siria.
“Estamos razonablemente seguros de que matamos al objetivo (...) ‘Yihadi John’”, dijo el coronel del Ejército estadounidense Steven Warren desde Bagdad.
Anoche mismo, el Presidente Francois Hollande, quien fue trasladado en helicóptero desde el estadio objeto de ataque al Ministerio del Interior, desde donde anunció la adopción de medidas extraordinarias de orden público, comunicó la declaración del Estado de Emergencia y el cierre de la frontera francesa.
Hoy París amanece llena de miedo. Se palpa el pánico en las calles y en los sitios públicos, en donde hay poca asistencia, según informan nuestros corresponsales.
Los gobernantes de muchos países se han pronunciado en estas horas, expresando su solidaridad con el gobierno y el pueblo francés, rechazando el terrorismo y diciendo estar al lado de los franceses en momentos dolorosos. Se han escuchado las palabras de Barack Obama, David Cameron, Angela Merkl, Mariano Rajoy, Raúl Castro, Nicolás Maduro, Juan Manuel Santos. Entre otros jefes de Estado. El Papa Francisco ha hablado de un hecho verdaderamente inhumano.
