El transfuguismo motivado por la reforma política, no es otra cosa que la confusión ideológica y la negación de los principios orientadores que en otrora condujeron a los movimientos sociales y políticos de la humanidad hacia las grandes revoluciones por las libertades individuales y los derechos humanos.
Se supone que la reforma nació como un salvavidas a las viejas prácticas políticas que engendraron la desconfianza y la pérdida de credibilidad en los últimos años frente a los movimientos políticos colombianos.
Izquierda y derecha se mezclan bajo la égida de los intereses particulares, o lo que es peor, por ignorancia, porque en su mayoría nuestros parlamentarios y un muy alto porcentaje de los electores confunden o no saben la definición ideológica a la cual pertenece un movimiento, una corriente o un partido político.
Por este motivo, considero de importancia hacer un paneo conceptual sobre la derecha, la centro-derecha, la izquierda y la centro-izquierda, que en principio parecerían términos futbolísticos con los cuales un técnico de fútbol arma sus estrategias, pero que en últimas desde la perspectiva de la politología resulta bastante interesante para los actores de la política nacional.
La derecha política, se afilia a la línea conservadora, liberal o religiosa que bien puede oponerse a la izquierda política. Esta corriente ideológica defiende la libertad individual (liberalismo), la defensa de la patria (nacionalismo, patriotismo), y el mantenimiento de un orden social establecido (tradicionalismo, conservadurismo). Su sector más liberal propugna por un libre mercado por encima del intervencionismo, que pretende la regulación estatal en lo privado y en lo público. Además, busca potenciar los valores, los derechos y las libertades individuales. Dentro de la derecha radical se defiende una sociedad rígidamente jerarquizada y disciplinada.
La derecha tiene dos vertientes: Derecha moderada (centro-derecha) y Ultraderecha o Extrema Derecha.
La centro-derecha es una derecha moderada entre el centro y la ultraderecha asignándole como función principal del Estado la garantía del orden, en términos de bienestar social y dentro de un compromiso democrático concebido sobre los consensos.
La ultraderecha, no negocia sus principios, especialmente cuando se trata de temas religiosos o de legalidad.
La izquierda política, prioriza el progresismo y la igualdad social, es decir, el crecimiento de la sociedad con un nivel de bienestar social para todos por encima del bienestar individual.
La izquierda también tiene diferentes corrientes, entre ellas, la izquierda revolucionaria (extrema izquierda o izquierda radical) que cuestiona la democracia liberal y el sistema capitalista; la izquierda democrática, en cuyo seno se desarrolla la socialdemocracia, que persigue la consecución de la igualdad social, y el eurocomunismo e izquierda transformadora, que se concentra en las problemáticas sociales; la izquierda anarquista que patrocina la desaparición de todo gobierno, negando la democracia representativa y al Estado.
Dentro de la izquierda, surgen diversos movimientos sociales como el sindicalismo, el ecologismo, el pacifismo, el feminismo, los movimientos sexuales y los movimientos antiglobalización.
La centro-izquierda política es la izquierda moderada en contravía a la izquierda revolucionaria o al comunismo. Ejemplos de centro-izquierda están la socialdemocracia, la tercera vía, el socioliberalismo y la nueva izquierda.
Lo opuesto a la derecha y a la izquierda es el totalitarismo.
Ante el transfuguismo nacional, dónde ubicamos a los voltearepas consumados que de un día a otro cambian de partido, como por ejemplo, de cambio radical a la U, o a Convergencia Ciudadana, mañana ADN, o al Partido Liberal, o al Conservadurismo?