Disturbios durante homenaje en un teatro de Santiago a Pinochet. Foto LA PRENSA/EFE/Felipe Trueba
Una escasa asistencia de público y violencia en las calles de Santiago caracterizaron este 10 de junio en la capital chilena un homenaje al fallecido dictador Augusto Pinochet, en una jornada que culminó con al menos 16 heridos, 25 detenidos y cuantiosos daños materiales, según diversas fuentes.
Un contingente policial reprimió violentamente a centenares de familiares de víctimas del régimen militar que intentaron acercarse a un teatro donde simpatizantes de Pinochet homenajearon al ex dictador con la proyección de un documental que lleva su nombre y que, según los organizadores, muestra “la verdad” sobre la figura y obra de quien consideran el mejor presidente en la historia de Chile.
“Esta es una muy mala señal para la democracia. Siento que el pinochetismo está dando la mejor cara de lo que realmente son. No tienen ningún grado de arrepentimiento”, dijo Mireya García, vicepresidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, cuyo hermano es un desaparecido.