Durante el foro que se lleva a cabo en las instalaciones de la Universidad Autónoma de México hemos estado hablando sobre los mecanismos de protección de los derechos fundamentales en América Latina y se ha estimado en especial lo referente al derecho a la salud que ya en Colombia
y en otros países se considera fundamental. Es natural que así sea dado su necesario vínculo con el derecho a la vida, la desprotección de la salud pone en riesgo el derecho a la vida y además, estando de por medio la dignidad de la persona humana, la pérdida de la salud en condiciones extremas o con características de progresivo deterioro afecta los derechos básicos individuales y familiares. Ahora bien, se ha elogiado aquí el sistema judicial de protección de los derechos fundamentales en Colombia, la eficacia de la acción de tutela con miras al amparo efectivo de los mismos, el bloque de constitucionalidad y la jurisprudencia de la Corte Constitucional sentada desde 1992 hasta hoy. Se estima por los profesores asistentes de toda América Latina que nuestro país está hoy a la vanguardia en esta indispensable tarea del Estado primordialmente en razón de la vinculación de los jueces y los tribunales a la inmediata adopción de medidas para interrumpir o impedir la violación de los derechos esenciales. Gran satisfacción como colombianos por ese reconocimiento pero también preocupación porque en Colombia se viene proponiendo -cada vez con mayor insistencia- que se acabe o se desaliente la acción de tutela.
