SARMIZA BILCESCU.- (1867-1935) Primera mujer abogada de Europa dedicada enteramente a defender los derechos de las mujeres.

 

Sarmiza Bilcescu nació en Bucarest. Fue hija de Dumitru Bilcescu, jefe de finanzas del príncipe rumano Barbu Stirbey y de Georgia Bilcescu, feminista convencida, que en 1884 terminó llevando a su hija a la ciudad de París, donde logró un cupo en la universidad para estudiar derecho. Se dice que fue gracias a su carácter que Sarmiza consiguió labrarse un lugar en la academia, donde fue recibida por su condición de mujer, con hostilidad por parte de profesores, alumnos y personal administrativo.

 

Edmons Louis Armand Colmet Para Santerre, catedrático  de derecho civil ante la petición de ingreso a la universidad que hiciera Sarmiza diría: “Dudamos en conceder a la señorita Bilcescu la autorización que ella exigía, temiendo que tuviéramos que vigilar los anfiteatros”. Pero al terminar sus estudios, el mismo Santerre la felicitaría por su “comportamiento incansable, loable e irreprochable”.

 

El primer día de estudio después de ser aceptada, el portero no la dejó ingresar y ella le increparía diciéndole que su comportamiento desconocía el lema “Liberté, égalité, fraternité” que estando en la puerta, le daba la bienvenida a los estudiantes y profesores de la institución.

 

En 1890 se graduó con la tesis titulada “Sobre la condición jurídica de la madre”, pero no ejerció la profesión, que dejó en segundo lugar, al contraer matrimonio con el ingeniero Constain Alimănişteanu. No obstante, hizo parte de movimientos feministas, fundando con Ana Haret, Sabina Cantacuzimo y María N. Filipescu, también de origen rumano, la Sociedad Rumana de Señoritas”.