OPINIÓN. EL CARTEL DE LOS BULLDOZER. ¿Cómo hacer dinero rápidamente en Colombia?. Clara Patricia Montoya Destacado

¿Cómo hacer dinero rápidamente en Colombia? Sea congresista, magistrado o funcionario público -con plenos poderes para tomar decisiones-,  favoreciendo asuntos que siendo de interés particular, afectan nuestro territorio nacional.

Vayamos tomando nota de las tarifas que –porque la corrupción galopa, mientras caminamos-, por concepto de comisiones y paralelo a gestiones ‘non sanctas’ de algunos magistrados, cobran algunos congresistas, por adelantar gestiones a favor de intereses particulares.

En el diario EL TIEMPO del domingo, estas son las ‘tarifas’ que “supuestamente” cobraron nuestros hombres de la patria –a título de prima de éxito-, por gestionar a favor de Odebrecht la firma de un megacontrato.

Se trata de los senadores Armando Benedetti, Alvaro Ashton, Musa Besaile, Antonio Guerra, Bernardo ‘Ñono’ Elías (ya preso por el caso) y Sandra Villadiego. Se vincula –igualmente-, al representante Alfredo Ape Cuello Baute y los exsenadores Martín Morales y Otto Bula; y, también, al secretario de movilidad de la Alcaldía de Samuel Moreno, Luis Bernardo Villegas.  

 La gestión -para ganarse las jugosas comisiones de éxito-, consistía básicamente en: “que a través de sus competencias y funciones presionaran decisiones en favor de Odebrecht”.

Federico Gaviria Velásquez, el empresario involucrado que a cambio de beneficios penales, prendió el ventilador, manifestó que para los implicados en este  escándalo de corrupción: “Existió una exigencia clara…   una gestión a éxito…”.

Sobre las condiciones económicas, dijo: “… para hacer dicha gestión quedó pactado un valor de DOS MILLONES DE DÓLARES para el grupo de senadores gestionados por Otto Bula; QUINIENTOS MIL DÓLARES PARA EL SEÑOR BULA y quinientos mil dólares para mí (…) Odebretch se comprometió a pagar en enero, máximo febrero del 2013, dicha gestión”.

Odebretch tenía otra ficha clave moviéndose en la ANI,  Luis Bernardo Villegas, secretario de movilidad de la Alcaldía de Samuel Moreno y según el ‘ventilador’ de  Federico Gaviria   -aunque advierte que no le consta pero afirma que lo escuchó de uno de los ejecutivos de la constructora-, a quien le entregaron en comisiones por su diligente trabajo ‘con el área jurídica de la ANI’, la suma de “SIETE MIL MILLONES DE PESOS”.

¿Cómo se realizaron estos pagos? Dijo el empresario Gaviria: “…se hicieron desde Brasil en giros que nunca superaron LOS 300.000 DÓLARES, para evitar encender alarmas de las autoridades (…) “El senador Bula, con su grupo de senadores buscó cuales empresas podrían ayudarle a recibir recursos en Panamá”  (…) y entre febrero y marzo de 2013 fueron monetizados en el país para (…) “cancelar las coimas respectivas” de los congresistas.

No llenas las arcas de los senadores, al parecer –dice el informe del diario EL TIEMPO con fundamento en lo que se está denunciando en la Fiscalía-, el Cartel “los Buldócer” bautizado de esta manera por quien fuera el presidente de Odebrecht Colombia en el 2012, señor Luiz Bueno,  ofreció de nuevo los servicios al presidente de la compañía para el año 2013, Eleuberto Martorelli, con el propósito de lograr –para Odebrecht-, una adición del megaproyecto: “En el primer trimestre del año 2013, el señor Bula y su grupo de senadores amigos le enviaron diferentes razones al señor Martorelli para ofrecer la gestión de ellos para acelerar la adición de Ocaña-Gamarra…” y Martorelli “ofreció el uno por ciento del valor de la obra y Otto [Bula] pedía el cinco por ciento, esto se concretó en el 4 por ciento del valor de la obra” (…) “Quedó comprometido Martorelli que toda vez firmado el otrosí, estos recursos iban a ser cancelados en su totalidad en el exterior por parte de Odebrecht a ‘los Buldócer’ (…) Finalmente se pactó y se cerró en una cifra que daba 80.000 MILLONES DE PESOS”.

“El señor Bula exigió en el primer trimestre del 2013 un anticipo de 4.000 MILLONES DE PESOS, que para esa época coincidía con elecciones de congresistas, que fueron pagados en Panamá a través de sus compañías amigas”.

“Él [Otto Bula] vendió sus servicios de su grupo de senadores o congresistas, decía él que entre 10 y 12, haciendo uso aparentemente de un concepto de cupos indicativos o que llamaban históricamente ‘auxilios paralamentarios’ para hacer un frente común para presionar a las entidades del Gobierno en su conjunto y obtener el visto bueno para lograr este contrato de adición (…). También quiero señalar que el señor Bula siempre vendió sus servicios como una persona experta en hacer gestiones de esta naturaleza, no era la primera vez que lo hacía”.

Esperamos los colombianos que de ser todo esto cierto, las personas involucradas sean investigadas y respondan ante la justicia;  y, que el Señor Fiscal en la rigurosidad que exige su cargo, no ceda a la tentación de responderle al senador Benedetti ante su estrategia de defenderse, atacando.

La presentación grosera y agresiva del senador involucrado en este caso de corrupción dio la sensación contraria a la pretendida, es decir, no pareció un inocente molesto por la afectación injusta de sus intereses personales y profesionales, sino un culpable agarrado en flagrancia. Su gestualidad acompañada de su descompostura para defenderse, pareció la de un pez recién capturado por un cebo, que instintivamente,  pelea fieramente por no dejarse pescar.

Si Benedetti es inocente y no se enriqueció como lo manifiesta en su denuncia el empresario Gaviria ¡qué saque las pruebas y se defienda con argumentos! ante la Corte Suprema, como lo hace y lo tiene que hacer la gente racional que no instintiva, honesta, humilde y trabajadora de Colombia ante los jueces, fiscales y magistrados.

Es verdad que como dice Voltaire ¡la mentira ha embaucado demasiadas veces a los hombres¡ pero también es verdad por otro lado y como bien lo dice el filósofo ¡que ya es tiempo de que se conozcan las pocas verdades que se pueden descubrir  a través de estas nubes de fábulas que cubren la historia¡.

En el escenario que se le plantea al senador Benedetti tiene que aceptar -sin tanta grosería-, que los colombianos merecemos saber toda la verdad de estas denuncias, sin detrimento de que en ejercicio de su derecho pruebe y argumente a su favor la inocencia, como lo tiene que hacer cualquier investigado que nada tiene que ver con el caso de corrupción denunciado y en el cual injustamente se le involucra; no obstante, de no hacerlo, insistiendo en su errática estrategia de defenderse no con argumentos, sino enlodando a todo aquel que toque sus intereses levantando con esa perfidia más dudas que certezas, también debe saber, que deberá responderle a la justicia y a todos los colombianos que trabajan para pagar sus impuestos y no merecen, de sus senadores y representantes, más bribonadas.

Tiene que terminar esta corrupción en los hombres y mujeres que están desempeñando cargos en los tres órganos del Poder Público en nuestro país y los colombianos tenemos derecho a saber la verdad sin que los involucrados lloren rodeados de sus esposas y sus hijos y sin que salgan a dar ruedas de prensa lanzando sus denuncias a los medios de comunicación.

 

 

 

Lea el artículo completo del diario El Tiempo, en este link: http://www.eltiempo.com/justicia/investigacion/federico-gaviria-el-ventilador-contra-el-grupo-de-senadores-conocidos-como-los-buldocer-152870

 

Modificado por última vez en Miércoles, 11 Mayo 2022 14:39
Clara Patricia Montoya Parra

Email Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Acerca de Nosotros

Nuestro propósito es aprovechar la tecnología en beneficio de la divulgación, el análisis, la controversia, la verificación de los grandes asuntos en que aparece el Derecho, en cualquiera de sus ramas; los procesos judiciales de trascendencia y los más importantes debates y acontecimientos.