Minas Gerais, en español Minas generales, es una de las 27 unidades federales de Brasil y limita al oeste con el estado de Espíritu Santo. El estado no tiene salida directa al mar pero en su territorio se encuentran las fuentes de algunos de los principales ríos de Brasil, uno de ellos es precisamente el río Doce, que nace en el municipio Santa Cruz de Escalvado en Minas Gerais y desemboca en el municipio de Linhares estado de Espíritu Santo en Brasil y es considerado –por su grandeza- símbolo de la región; sin embargo hoy –para algunos ecologistas a propósito de lo sucedido- el río Doce es un río muerto.
El 5 de noviembre de 2015, se rompieron dos muros de contención en la mina Germano de la empresa brasilera Samarco Mineração S.A., empresa dedicada a la extracción, procesamiento y exportación de mineral de hierro, en la región de Bento Rodrigues (Minas Gerais). Pese a que el día siguiente le fueron suspendidas las actividades a la empresa, el daño ambiental ya estaba hecho.
Imagen de Ricardo Moraes (REUTERS)
El tsunami de lodo recorrió más de 700 Km, pasando por una zona de protección ambiental para el desove de tortugas marinas –algunas especies en peligro de extinción- en la costa del estado de Espíritu Santo, hasta llegar al mar y se anuncia como la mayor tragedia ecológica de Brasil.
El fotógrafo Sebastião Salgado tras visitar la zona dijo para el diario español EL PAIS: "Presencié uno de los espectáculos más terribles de mi vida. Todos los peces del río, sin excepción, están muertos" y, el diario brasilero 'Folha de S. Paulo' registra la muerte de los peces por cuenta del taponamiento que sufrió la desembocadura del Río Doce en la zona de Linhares en el Estado de Espíritu Santo.
IMAGEN DE: Enrico Marcovaldi (EFE)
Las actividades de la empresa Samarco están suspendidas mientras se adelanta la investigación y por el momento únicamente está autorizada para realizar acciones de emergencia, es decir “aquellas que minimicen el impacto de la rotura de los diques y prevengan nuevos daños”. La Fiscalía le ordenó resolver la situación de los más de 600 desalojados, pagar sueldo a las familias afectadas y elaborar una lista con los nombres de todas las víctimas y, en eso está Samarco, según registra su página web. http://www.samarco.com/
Imagen de www.samarco.com
Marchas y protestas no se hacen esperar y los manifestantes piden justicia y la aplicación rigurosa de la ley para los responsables de la tragedia. Resaltan a la par la negligencia de Samarco en el desastre humano y ecológico sucedido, ya que –según ellos- la empresa explotadora de hierro estaba al corriente desde hace mucho tiempo de los riesgos que los diques de Fundão y Santarém ofrecían a la población y las graves consecuencias ecológicas que la rotura de los mencionados diques proyectaría para la zona, es decir, Samarco conocía el estado de los muros de contención y pese a ello no tomó medidas preventivas. Así las cosas, lo sucedido a comienzos del mes de noviembre del año 2015, se traduce -para muchos- en una tragedia anunciada.
Imagen de Ricardo Moraes (REUTERS)
