Desde Miami, centro de convergencia latina por excelencia en Estados Unidos, el diagnóstico de los expertos en seguridad no es benigno ni para nuestra región ni para nuestro país. Latinoamérica tiene los niveles de homicidio más altos del mundo, la impunidad alcanzan el 95 %, la corrupción es rampante, el secuestro y la extorsión son moneda común, en fin, es el continente más peligroso del globo.

 

Con este telón de fondo, las izquierdas gobernantes fracasan estruendosamente: el PT en Brasil y el chavismo en Venezuela, se robaron sus petroleras; el kirchnerismo llevó al país al default económico; Correa empieza a cosechar lo que ha sembrado: radicalismo. En Bolivia, Evo se proclama eterno y en Nicaragua, la entrega de territorio a los chinos está generando insurgencia. La protesta social bulle en Chile, Perú y toda Centroamérica.

 

Algunos conferencistas concluyeron en lo ya sabido: que todos los grupos terroristas actuales, farc, eln, sendero y el ejército del pueblo paraguayo, están íntimamente ligados al narcotráfico y que todos los problemas de seguridad ciudadana en la región, están vinculados directa o indirectamente al narcotráfico. Colombia, por su parte, aumentó 44 % los cultivos de hoja de coca, lo que implicaría una producción potencial de 52 % más de cocaína generando recursos que fortalecen a los narco-marxistas-leninistas. Además, al Presidente no le cree ni el 30 % de los colombianos, las farc presionan con acciones terroristas y sabotaje y las Fuerzas Militares son estigmatizadas por oscuros intereses extraterritoriales.

 

La Seguridad, primer deber de cualquier Estado, se está evaporando aceleradamente en el país, la justicia es ineficiente y la economía empieza a desbarajustarse.

 

Según un expositor, las farc están en un proceso de acumulación de fuerzas. Su Plan “Dona Amanda”, busca adquirir material bélico ruso que incluye misiles Super Igla y Strela-2, para evitar ser eliminadas por las fuerzas gubernamentales en una eventual ofensiva militar, que hoy apoyaría la mayoría ciudadana. Un geopolítico propuso que las Farc planearían crear una “Zona Autónoma” (Zona de Reserva Campesina) en la frontera colombo-venezolana, que buscaría el reconocimiento de algunos países, Rusia entre ellos, cuyo gobierno tendría interés en amenazar o mortificar a US, el cual, a su vez, teje alianzas en Eurasia, uno de los ejes de la seguridad mundial, para frenar las ambiciones expansionistas de Putin. Las recientes aproximaciones de Obama al triángulo La Habana-Caracas-Managua, buscarían neutralizar tales intenciones. Así se movería el ajedrez geoestratégico.

 

El comentario de una analista no nos sorprende: “Si fracasa lo de La Habana, los negociadores mutarán de necios a heroicos patriotas. La irresponsabilidad, seguirá siendo el signo de la política de ese país”.

 

“No van nada bien ustedes en Colombia, eh”, remata un experto argentino. ”Pero no te preocupes, che, nosotros tampoco: mira lo de la copa”.

 

Artículo pubicado en www.elcolombiano.com el 9 de julio de 2015.

 

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N. de la D.

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