Ante la opacidad del Mando Militar frente la Traición a la Patria que prefigura el Dr. Jesús Vallejo Mejía, al Golpe de Estado técnico que proclama el Dr. José Gregorio Hernández, el desbarajuste del Estado que explica el Dr. Pedro Medellín, la aberrante y generalizada corrupción, el desbarajuste de la justicia, la inseguridad y la desconfianza de más del 85 % de la opinión pública, no solo es “necesario o conveniente”, sino apremiante y obligatorio que la RA se movilice legal, democrática, organizadamente, para ayudar a impedir que la mojiganga comunista con sus narcofortunas asalte el poder total desde la balcanización a la que conducirán las regiones autonómicas cedidas por el gobierno de turno, desgobierno que deberá ser llamado a responder por sus desatinos.
La RA, aprendida y ejercitada en el orden, la justicia, la igualdad y el esfuerzo individual, ofrece actualmente tres movimientos con vocación política: Fuerza Republicana, Patria Nueva y Rafa, los cuales corporativamente deberán promover, entre otras propuestas, la recuperación del Fuero Militar, la seguridad pensional, el mejoramiento del servicio de salud, el voto militar y mayor promoción de la suboficialidad al escalafón de los Oficiales.
Una Escuela Única de Liderazgo Militar, es excelente idea. En el ámbito social, necesita manifestar la adhesión inequívoca a la familia como célula fundamental de la sociedad, a la libertad de credo y opinión, a la democracia con alternancia en el poder, a la economía de mercado, a la propiedad privada y a la subordinación militar al poder civil legítimo y legal.
Frente al narcotráfico, amenaza principal contra el Estado de Derecho y contra nuestra convivencia social interna y externa solo cabe, con el apoyo de Estados Unidos, la fumigación aérea de los cultivos ilícitos y la extradición de sus capos sea cual fuere su filiación política.
Es urgente e imperioso, desmontar la injerencia en los altos asuntos del Estado de cubanos, venezolanos, chilenos y nórdicos y reevaluar las relaciones con Cuba y Venezuela. Expulsar a los miembros del G2 castrista es una obligación patriótica y moral, antes de que sea tarde. Mírese a Venezuela.
Y por supuesto, la vindicta del comunismo internacional (JEP) contra nuestros soldados y empresarios debe ser desmontada.
Estos principios deben ser animados por la RA, llamada a jugar un papel decisivo en la contienda electoral en desarrollo, so pena de nunca poder reclamar ninguna valía si permite que Colombia se convierta en un narcoestado dirigido por matones disfrazados de incorruptibles benefactores del pueblo.
La lobotomía política comunista de ciudadanos-pingüinos aplaudidores, no cabe en el país.
* Miembro de Acore Antioquia
http://www.elcolombiano.com/opinion/columnistas/la-hora-de-la-reserva-activa-ra-DE7125173
Tomado de: https://www.jmarulanda.com/site/2017/08/17/la-hora-de-la-reserva-activa-ra/